Una confirmación de la presencia de pumas, de los cuales no se tenían registros desde el 2014, como también la alta distribución del guanaco, permitió la instalación de cámaras trampas en las aguadas del Parque Nacional Llanos de Challe, Región de Atacama, unidad administrada y gestionada por la Corporación Nacional Forestal (CONAF).
Así lo confirmó el informe emitido por la administradora y guardaparques de esta área protegida, Gabriela López, quien resaltó que el objetivo de instalar cámaras trampas en las 13 aguadas de la unidad durante la época estival, tuvo como objetivo central identificar las principales amenazas que afectan estos ecosistemas durante el periodo de verano, ya que se ven aumentadas debido al incremento de visitantes.
Además, estas cámaras fueron programadas, algunas de ellas, para captar videos, dejando hermosos registros de fauna nativa, como también de las amenazas existentes. En fauna se identificó la presencia de puma (Puma concolor) en tres aguadas, dos ubicadas en el sector norte del parque nacional (Panul y Los Yales) y la última en el sector costero, destacando que esta especie no se registraba en la unidad desde el 2014.
También ratificó la actividad de los guanacos en la totalidad de los sectores monitoreados, como también de zorros chilla, lo que confirma el uso del hábitat por parte de esta fauna nativa y la importancia del recurso hídrico al interior del Parque Nacional Llanos de Challe para la sobrevivencia de especies con problemas de conservación.
En relación a las amenazas, se identificaron especialmente la presencia de perros y ganado doméstico. Para la administradora y guardaparques, Gabriela López, tras el análisis de los registros, se confirmó que “la mayor amenaza a la fauna nativa son los perros, lo que nos lleva a seguir mejorando el plan de trabajo que hemos venido realizando, especialmente involucrando a los visitantes y comunidades aledañas”.
Uno de los aspectos que más resaltó el gerente de Áreas Silvestres Protegidas de CONAF, Italo Rossi, es que “el sistema de monitoreo con cámaras trampas nos permite trabajar los planes de conservación de especies en alguna categoría de peligro y detectar las amenazas existentes en las áreas protegidas que administramos a lo largo del país. En CONAF Atacama estamos trabajando con los municipios locales el tema de los perros, fomentando especialmente la tenencia responsable.
Así también lo resaltó el jefe del Departamento de Áreas Silvestres Protegidas de CONAF Atacama, Jorge Carabantes, quien explicó que “el monitoreo basado en el uso de cámaras trampas es una herramienta útil en la toma de decisiones para la ejecución de actividades claves que permiten reducir las amenazas identificadas que afectan a los objetos de conservación de la unidad, como por ejemplo el control y captura de perros que hemos desarrollado, involucrando a los municipios de las zonas aledañas a los parques nacionales”.
Cabe destacar que según los estudios realizados por CONAF, las principales amenazas en esta área protegida de Atacama, están asociadas al turismo no regulado, al ingreso de personas a lugares no habilitados, caza furtiva, presencia ganado doméstico y también la presencia de perros. Esta última, es la principal amenaza que tienen especies como el guanaco y los zorros en el territorio. Para el caso de los guanacos, por el ataque y caza, y para los zorros por la transmisión de enfermedades.
Una confirmación de la presencia de pumas, de los cuales no se tenían registros desde el 2014, como también la alta distribución del guanaco, permitió la instalación de cámaras trampas en las aguadas del Parque Nacional Llanos de Challe, Región de Atacama, unidad administrada y gestionada por la Corporación Nacional Forestal (CONAF).
Así lo confirmó el informe emitido por la administradora y guardaparques de esta área protegida, Gabriela López, quien resaltó que el objetivo de instalar cámaras trampas en las 13 aguadas de la unidad durante la época estival, tuvo como objetivo central identificar las principales amenazas que afectan estos ecosistemas durante el periodo de verano, ya que se ven aumentadas debido al incremento de visitantes.
Además, estas cámaras fueron programadas, algunas de ellas, para captar videos, dejando hermosos registros de fauna nativa, como también de las amenazas existentes. En fauna se identificó la presencia de puma (Puma concolor) en tres aguadas, dos ubicadas en el sector norte del parque nacional (Panul y Los Yales) y la última en el sector costero, destacando que esta especie no se registraba en la unidad desde el 2014.
También ratificó la actividad de los guanacos en la totalidad de los sectores monitoreados, como también de zorros chilla, lo que confirma el uso del hábitat por parte de esta fauna nativa y la importancia del recurso hídrico al interior del Parque Nacional Llanos de Challe para la sobrevivencia de especies con problemas de conservación.
En relación a las amenazas, se identificaron especialmente la presencia de perros y ganado doméstico. Para la administradora y guardaparques, Gabriela López, tras el análisis de los registros, se confirmó que “la mayor amenaza a la fauna nativa son los perros, lo que nos lleva a seguir mejorando el plan de trabajo que hemos venido realizando, especialmente involucrando a los visitantes y comunidades aledañas”.
Uno de los aspectos que más resaltó el gerente de Áreas Silvestres Protegidas de CONAF, Italo Rossi, es que “el sistema de monitoreo con cámaras trampas nos permite trabajar los planes de conservación de especies en alguna categoría de peligro y detectar las amenazas existentes en las áreas protegidas que administramos a lo largo del país. En CONAF Atacama estamos trabajando con los municipios locales el tema de los perros, fomentando especialmente la tenencia responsable.
Así también lo resaltó el jefe del Departamento de Áreas Silvestres Protegidas de CONAF Atacama, Jorge Carabantes, quien explicó que “el monitoreo basado en el uso de cámaras trampas es una herramienta útil en la toma de decisiones para la ejecución de actividades claves que permiten reducir las amenazas identificadas que afectan a los objetos de conservación de la unidad, como por ejemplo el control y captura de perros que hemos desarrollado, involucrando a los municipios de las zonas aledañas a los parques nacionales”.
Cabe destacar que según los estudios realizados por CONAF, las principales amenazas en esta área protegida de Atacama, están asociadas al turismo no regulado, al ingreso de personas a lugares no habilitados, caza furtiva, presencia ganado doméstico y también la presencia de perros. Esta última, es la principal amenaza que tienen especies como el guanaco y los zorros en el territorio. Para el caso de los guanacos, por el ataque y caza, y para los zorros por la transmisión de enfermedades.
